El presidente Sebastián Piñera habló ayer martes ante la ONU y dijo que confía en la nueva Constitución para poder encausar la crisis que se originó en el 2019. Además, lamentó que la región esté inmersa en el “virus del populismo” y otras amenazas de la democracia.
“Esperamos que la Convención proponga el texto de una nueva Constitución que, mejorando y corrigiendo todo aquello que deba ser enmendado, también incorpore mayor equidad y justicia social y proteja nuestras libertades”, explicó. También alertó de que Chile no está exento de las amenazas que suponen “el cáncer de la polarización y la peste de la fragmentación política”.
A partir de las restricciones derivadas de la pandemia el mandatario debió grabar un discurso en el que aseguró que “Chile fue capaz de encauzar el estallido social y sus legítimas demandas a través de un proceso pacífico, institucional y democrático”.
Por último, añadió: “La principal amenaza viene de Gobiernos electos, con legitimidad de origen que maniobran para mantenerse en el poder”. También afirmó que las democracias han experimentado un “proceso de progresivo deterioro”.