La tarde del martes fue fatídica otra vez para La Roja, que pudo volver a la victoria frente Qatar pero que tuvo a un errático Alexis Sánchez en el final. La selección que dirige Berizzo, pese a seguir sin triunfos, volvió a convertir de la mano de sus dos ídolos y recuperó sus buenas sensaciones futbolísticas, con la mala fortuna del tocopillano desde los 12 pasos.
Alexis Sánchez no se escondió tras el 2 a 2 frente a Qatar en Austria y declaró luego del partido en el que alcanzó los 50 goles en La Roja en 150 encuentros y sigue siendo el máximo goleador. Tras convertir el 1 a 0 parcial y fallar el penal en los últimos minutos, el tocopillano habló de cómo es el orden jerárquico para patear: “No es fácil, asumo mi responsabilidad. Con Arturo siempre estamos uno él y uno yo. Hoy me tocó”, señaló inicialmente.
En esa línea, Alexis Sánchez aseguró que siempre quiere ganar, exigirse en todo y también a sus compañeros, remarcando que si no compite bien, se siente mal: “Estuve una hora solo en el hielo. Hay cosas que la gente que no sabe, pero son cuestiones que el futbolista a veces vive. Me siento mal al fallar”, insistió el goleador histórico. A pesar de estar en el tramo final de su carrera, el “Niño Maravilla” mantiene la vara de la exigencia en el mismo lugar que siempre.
Sin embargo, Alexis Sánchez dejó el martirio de lado para ponderar justamente todo lo realizado durante su exitosa carrera tanto en los clubes que vistió como en La Roja misma. El tocopillano aseguró que seguirá pateando penales con la selección y sacó pecho de su palmarés: “Si toca otro penal, lo voy a patear. Por algo soy el goleador histórico de la selección, con más asistencias y el que tiene más partidos con Gary Medel”, sentenció.