Durante la ceremonia de cambio de mando, se pudo ver a Gabriel Boric muy cercano al presidente argentino, Alberto Fernández. Es más, el primer destino que visitó el Jefe de Estado electo fue Argentina en el marco de la primera gira internacional en lo que fue el comienzo de gestión. Pero, en las últimas horas, el mandatario se diferenció del país vecino, marcando con claridad una discrepancia en la forma de administrar la nación.
En este sentido, Gabriel Boric apuntó contra los planes sociales, una política económica enfocada íntegramente hacia los sectores más vulnerables de Argentina. Tras esto, el Jefe de Estado brindó una entrevista al medio "Cooperativa", donde fue consultado por el plan para impulsar el crecimiento económico ("Chile Apoya"), cuyo fin es fomentar la reactivación financiera. “Tenemos que ser precisos, no podemos meter a todo en un mismo saco. Yo creo que cuando se cronifican las ayudas estatales, como ha pasado en algunos países hermanos, se termina distorsionando la economía; y eso le termina haciendo más daño a la población”, partió diciendo.
De esta manera, Gabriel Boric cuestionó los planes sociales y afirmó que no es la solución a "los problemas estructurales de la desigualdad", sino que "terminan haciendo mucho daño a la mayoría de su población”. Tras esto, sostuvo: “Yo fui hace poco a nuestro país hermano de Argentina, en donde los sueldos del sector regulado habían subido en un 74% el último mes. Ustedes dirán: ‘¡Qué bueno!’. Pero la inflación es de 70%, y el nivel de informalidad es cerca de dos tercios. Entonces, si nosotros no somos responsables hoy día, en donde se entregaron ayudas universales, se llevaron adelante políticas de retiro, pero hay un momento en que hay que parar en eso”.
En esta línea de análisis, el presidente marcó un claro camino para su pueblo y planteó una mejor opción para llevar adelante la economía en el país: “Acá lo que tenemos que hacer es fortalecer el empleo, apuntar hacia cambios estructurales en el modelo de desarrollo. Tenemos que apoyar por cierto a la clase media, y a quienes más lo necesitan”. Finalmente, para acompañar las medidas estructurales, Gabriel Boric armó una agenda de corto plazo que comenzará con "el sueldo mínimo, canasta básica protegida, contención de precios de los combustibles".