Está más que claro que la presencia de Izkia Siches es motivo de desagrado por parte de parlamentarios de la oposición. Sin embargo, la Ministra del Interior no tienen ninguna clase de reparo al momento de realizar declaraciones que, en el último tiempo, no mantienen la respectiva diplomacia hacia sus pares. En este sentido, la mandataria lideró una sesión en el Congreso la cual estuvo enmarcada de una serie de desafortunadas frases que causó la ofensa de los allí presentes, quienes decidieron abandonar el recinto.
En este contexto, Izkia Siches había asistido al parlamento para solicitar una nueva prórroga del Estado de Excepción para hacer frente a la crisis que enfrenta la Macrozona Sur del país. De esta manera, el decreto impulsado por Gabriel Boric necesitaba del respaldo de los funcionarios de la Cámara de Diputados para continuar con esta política de prevención. Pero la jornada no ocurrió como se esperaba, pues la oriunda de Arica realizó un polémico descargo en la que sostuvo: "Los problemas no partieron el 11 de marzo, ni para la delincuencia, ni para la migración, y mucho menos para La Araucanía. Donde los últimos cuatro años, y esto lo quiero recalcar porque parece que a algunos se les olvidó, [...], o realmente pareciera que todo partió desde cero", donde también dio a entender que sus rivales al parecer se lastimaron el cráneo lo que les produjo una ligera amnesia.
Este exabrupto causó el inmediato repudio de los congresistas quienes le exigieron que se rectracte de sus infautosos dichos. "Nadie en este hemiciclo se ha pegado en la cabeza. Todos tienen el legítimo derecho de votar y de representar a la gente de sus distritos", enfatizó el diputado Jorge Alessandri. No obstante, tal fue el revuelo que se generó en el interior de la institución gubernamental que el debate debió suspenderse. Luego de unos minutos, Izkia Siches retomó su discurso y ofreció las disculpas correspondientes a sus pares, también debió borrar la ofensiva frase del acta parlamentaria.
Por su parte, otro de los políticos que expresó su descontento con lo acontecido fue Raúl Soto Mardones, quien consideró: "Los hechos ocurridos representan una falta de respeto a la institucionalidad de esta Cámara". Finalmente, pese a estos idas y vueltas por parte de los representantes, el petitorio del Ejecutivo fue aprobado con 121 votos a favor, 6 en contra y 4 abstenciones. "Hemos querido ampliar la querella en torno a estos hechos que nos parecen graves y solicitar una serie de diligencias investigativas para demostrarle al país que nuestro Gobierno está comprometido con resolver los conflictos en la zona", sentenció Izkia Siches desde La Moneda.