En los últimos días trascendió que el padre de Benjamín Vicuña fue internado por una contundente hemorragia interna. Esto sucedió poco después de que su amigo Gonzalo Valenzuela desclasificara la profunda amistad que tenían sus padres antes de que los actores nacieran.
En el plano de lo que es su familia, Vicuña fue encontrando su tono para elegir qué quiere dejar trascender de su vida privada. Es que el permanente asedio de los medios de espectáculos trasandinos pusieron a prueba las habilidades comunicacionales del actor para evitar regalarle títulos fáciles a la prensa. Por ejemplo, debió aclarar cuál es la cercanía real que tiene con sus hijos: “No sé por qué se cuestiona mi rol. Yo vivo en la Argentina para estar cerca de mis hijos”, dijo hace poco tiempo.
Vicuña reforzó esta declaración al compartir en sus historias de Instagram varias fotografías junto a su hija Magnolia, producto de su vínculo con la "China" Suárez. El actor fue junto a su pequeña a una producción fotográfica, en la que también participó vestida de sirena y peinada con una trenza cocida. En el pie de la foto, el actor hizo referencia a Magnolia como la niña de sus ojos.
De esta manera, Benjamín Vicuña se aleja de los numerosos rumores que buscan situarlo como un padre ausente. El actor aseguró en varias entrevistas que no hay una metodología explícita para paternar, pero que permanentemente intenta asemejarse a la mejor versión que sea posible: “Es algo a lo que le dedico mucho tiempo y reflexión. Siempre quise ser papá”, señaló.