La semana ha sorprendido en diversas formas al Presidente Gabriel Boric. Una de ellas, tal vez la más destacada de todas, se tradujo en su reencuentro con Sebastián Piñera, quien fuera primer mandatario de nuestro país durante dos períodos, además de predecesor del actual Jefe de Estado. En acontecimiento, inesperado para los ciudadanos, despertó reacciones de todo tipo.
Aún envuelto en un sinfín de críticas, Gabriel Boric mantuvo firme su decisión de asistir a la asunción del flamante Presidente de Paraguay, Santiago Peña, en compañía de Sebastián Piñera. Y es que al ser notificado sobre la invitación que el exfuncionario había recibido, el Jefe de Estado no dudó en convocarlo a su avión presidencial para compartir los vuelos de ida y vuelta al país. A pesar de sus buenas intenciones, el accionar del Jefe de Estado no cayó muy bien entre sus simpatizantes.
Cuestionado por su propio círculo, Gabriel Boric no se dejó persuadir. De hecho, consiguió un respaldo a su particular comportamiento: el del ministro de Relaciones Extreriores, Alberto van Klaveren. "La verdad es que no hay una expresión más republicana que un exPresidente y un Presidente en ejercicio se reúnan, que conversen, que dialoguen. Tuvieron un intercambio muy interesante", declaró la autoridad a los medios locales.
"Lo que necesita el país en estos momentos es diálogo y la búsqueda de acuerdos y eso es lo que esperan todas y todos. Y en consecuencia, este viaje también cabe ser destacado por eso", complementó el ministro. Más tarde, indagado por la actitud de Sebastián Piñera, el funcionario de Gabriel Boric declaró: "Hay que destacar su voluntad de diálogo y de buscar acuerdos que son muy relevantes para Chile en estos momentos".