Luego de una seguidilla de varias semanas complejas para Gabriel Boric, el mandatario parecía entrar en un período de recuperación de su imagen positiva, a la vez que se preparaba para el evento de la Cuenta Pública anual. Sin embargo, en una de sus últimas reuniones con referentes sudamericanos, el Presidente de Chile revirtió esa relativa tranquilidad al ganarse un nuevo contrincante.
Gabriel Boric participó de la más reciente cumbre de Jefes de Estado de América del Sur, en donde varios de sus pares analizaron el presente continental y de cada país, además de redactar declaraciones conjuntas sobre los temas de agenda. En dicha asamblea, el oriundo de Punta Arenas dejó en evidencia su descontento con las declaraciones de Lula Da Silva, iniciando una disputa con uno de los mandatarios más influyentes de la región y del mundo.
Y es que Gabriel Boric respondió los mensajes de Lula, quien relativizó la crisis actual de Venezuela. “Manifesté respetuosamente que tenía una discrepancia con el presidente Lula. (La situación de Venezuela) no es un construcción narrativa, es una realidad seria”, declaró la autoridad máxima de nuestro país, que recibió el apoyo de Lacalle Pou por sus dichos.
Aunque tal vez enemistarse con el actual mandatario de Brasil no sea la mejor opción para Gabriel Boric y para los intereses del país hoy día, el Presidente expresó su repudio ante los comentarios de Lula Da Silva de todas maneras. Y no perdió la oportunidad para compartir una reflexión sobre la situación de la potencia petrolera y su endeble democracia.