La reina Isabel II de 96 años redujo sus apariciones públicas en los últimos meses producto de los continuos problemas de movilidad que padeció. Sin embargo, trascendió esta mañana que la monarca participó en la "ceremonia de las llaves" en Edimburgo, capital de Escocia. La acompañaron el príncipe Eduardo y su esposa Sofía.
Isabel II se trasladó a su residencia oficial en Escocia el lunes para dar comienzo a una semana de eventos tradicionales. El itinerario dio inicio con una ceremonia en el Palacio de Holyrood. La reina estuvo de pie y sonriente en el patio frontal, junto a un colaborador que sostuvo un paraguas encima de ella.
De esta manera, la reina Isabel II recibió simbólicamente las llaves de la ciudad y la bienvenida a su “reino antiguo y hereditario de Escocia”. La tradición se completa cuando la monarca las devuelve, en símbolo de confianza de custodia a los funcionarios electos de la ciudad. Dentro de las actividades, también se espera que Isabel II se presente hoy en una ceremonia militar dentro de los jardines del palacio. El desfile tiene como objeto rendir homenaje a su papel como jefa de las FF. AA. del Reino Unido.
La reina Isabel II comparece en este evento público tres semanas después del Jubileo de Platino, en el que celebró sus 70 años en el trono. En dicho evento, Isabel hizo unas pocas y breves apariciones durante el fin de semana festivo de cuatro días, en la que ciertos funcionarios dijeron haberla visto con cierta “incomodidad” durante esos eventos.